Esa consistente fragilidad
ese fulgor.
Esa refrescante vitalidad
este temblor.
Esa vibrante serenidad
ese frescor.
Esa ingente amabilidad
ese verdor.
Esa fuente de bondad
ese candor.
Esa menguante oscuridad
ese rubor
(por)
esta entente de verdad.